¿Qué influye en el rendimiento
escolar de los niños y niñas de hoy día?
En el rendimiento escolar de las
nuevas generaciones, influyen en la actualidad más cosas de las que somos
realmente conscientes.
Como nuestras vidas están patas
arribas, que si el trabajo, que si la casa, a los niños los mandamos a hacer
muchas actividades extraescolares, bien sea hacer deporte o ir a academias,
esto último sí que influiría positivamente en el rendimiento escolar.
Muchas veces queremos tener a los
niños tan activos, que no nos paramos a
pensar lo que realmente necesitan, que puede que sea sentarnos a su lado y
ayudarle en los deberes, prestarles atención, porque también la merecen.
Esta múltiple actividad puede
ocasionar un bajo rendimiento y fracaso escolar, que profundizaremos después.
¿Cuáles son los principales
factores que influyen?
Los principales factores de
carácter general que encontramos, están ligados a características
socioculturales, escolares y familiares.
Socioculturales: el rendimiento del niño/a se verá influenciado,
sobre todo en los primeros años, por los cimientos socioculturales que habiten
en su casa. Cómo se relacionen sus padres con el mundo de la educación tendrá
gran influencia, el niño ha de tener unos valores sobre su educación y si en su
ambiente familiar es de importancia, para el niño lo será.
Escolares: el ambiente escolar también es un factor muy importante,
al que no le damos mucha importancia, parece que el niño/a aprende sin más lo
que viene en los libros, el maestro/a lo enseña y no hay más.
Pero la metodología que usamos es
muy importante a la hora de enseñar a los más pequeños. Hay que saber
enseñarles bien, hacerles que entiendan los motivos de porqué deben aprender,
hacerlo de manera que ellos muestren interés, que no sea una carga. Porque si
conseguimos esa atención, y sabemos aprovecharla, podemos hacer que los niños
vuelvan a casa con ganas de hacer los deberes, e incluso motivados para
experimentar más con sus propios conocimientos.
Familiares: este factor está relacionado con el ambiente sociocultural.
Que los padres no hayan ido a la universidad o que no tengan estudios
superiores de ningún tipo, no tiene porqué afectar negativamente sobre el niño,
si los padres piensan que ha de estudiar porque eso le ayudará el día de
mañana.
Pero sí que es cierto, que en
hogares de no un gran nivel económico-cultural a la hora de alentar a los niños
para estudiar, se le da menos importancia, lo que provoca bajas nota y fracaso
escolar, y en la etapa de la ESO incluso absentismo.
Aquí llegamos a la parte del Fracaso Escolar, algo de lo que
deberíamos estar más preocupados e intentar, si no extinguirlo, reducirlo a
gran escala.
Y no por los resultados que
obtenemos de Pisa, sino por nuestro propio bien común y el nuestros
predecesores.
Concienciar a todas las familias
de la importancia de una educación, de saber, de aprender. Porque concienciando
a las familias ya no solo tenemos el apoyo escolar de querer que aprendan, sino
que en casa les infunden ese cariño por el saber.
Una de las cosas más importantes
es hacerles pensar a los niños, a la vez que les enseñamos que si ellos “investigan”
en las cosas sobre las que estudian y aprenden, pueden saber más cosas que
pueden llegar a ser muy interesantes.
Puede que un niño, tenga algún
tipo de deficiencia que no le deje avanzar de igual manera a sus compañeros, y
si sus notas sean suficientes. Pero nos estamos perdiendo a niños
verdaderamente listos, con una chispa en los ojos, y no sabemos articular la
maneta para que vayan más allá.
Pero cuando de las notas bajas
pasamos al fracaso, entramos en un punto más hondo, que nos lleva de cabeza a
un futuro absentismo sino ponemos el remedio. El fracaso viene de la mano con
el desinterés por todo que tenga que ver con la educación, y si en casa no
recibe reprimendas por llegar con más de 3 y 4 asignaturas suspensas, llega el
momento del absentismo. Si suspendo y en casa no me dicen nada, todo sigue como
siempre, para qué ni siquiera voy a ir a clase.
ESTO ES LO QUE TENEMOS QUE
EVITAR.
¿Es un punto sin retorno?
No, pero cuando estos
adolescentes ya han perdido el interés, es difícil volver a encauzarlos hacia
donde estaban, pero si encontramos esa maneta y la accionamos correctamente,
puede que encuentren algo que estudiar y aprender que realmente para ellos
valga la pena.
Bibliografía:
- Departamento de Métodos de Investigación y Diagnóstico en Educación (2001). Factores familiares vinculados al bajo rendimiento. Revista Complutense de Educación, Vol.12 (nº 1): 81-113.
- Marchesi, A. (2003). El fracaso escolar en España.
- Gil, J. (2013). Medición del nivel socioeconómico familiar en el alumnado de Educación Primaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario